Seguimos con otra guitarra de generosas dimensiones, una hermosa culona, rubia, de 17 y asiática. Aunque parezca que estamos hablando de otra cosa, se trata de esta pieza:
La prolífica compañía coreana Cort es la responsable de esta archtop hermosota, uno de los primeros modelos signature que hicieron. Fue diseñada contando con la colaboración de Larry Coryell, el guitarrista que la firmaría. Estéticamente está inspirada en la Gibson L5, aunque no se debe caer en la tentación de compararlas, no sería justo dada la gran diferencia de precio.
Afianzados en la construcción de guitarras de gama baja-media, Cort ofrece de vez en cuando alguna perla, como es el caso que nos ocupa, aunque actualmente ya no se fabrica.
En la construcción de una archtop, aunque sea de maderas laminadas, hay ciertos pasos que son necesariamente trabajosos y parece que en esta ocasión decidieron que, ya puestos, iban a hacer las cosas bien, aunque no les duró mucho el arrebato. La LCS-1 fue reemplazada por la LCS-2, una versión más económica, también discontinuada y sucedida por el modelo Yorktwon, el único modelo de caja (media caja) que tienen ahora en catálogo.
Imagino que la supervisión de Larry Coryell sobre un modelo que iba a llevar su nombre también influiría en gran medida, ya que si iba a llevar su firma no querría que fuese un adefesio de guitarra. Esta es, o debería ser, una de las garantías de los modelos signature, que un guitarrista famoso se juegue su reputación al unir su nombre a una guitarra. Aunque lo de jugarse la reputación creo que es demasiado decir.
Este podría ser un interesante tema para tratar en profundidad, los modelos signature con sus contratos de exclusividad, pagos de tentadoras cantidades de parné por el nombre, etc.
La verdad es que no he visto nunca a Larry Coryell tocando con esta guitarra, hasta el modelo con el que sale posando, en las fotos de promoción que se hicieron en su día, tiene la pala diferente. Da que pensar, aparte de que este hombre cambia más de guitarra que de calcetines… En fin, vamos al grano, que me lío.
CÓMO ES
Esta es una archtop de las grandes, bueno no, las grandes de verdad son las de 18″, pero eso ya es otro mundo. Además de ser de 17″ tiene un ancho de caja de 9 cm., tamaño equivalente a una acústica jumbo con algo menos de profundidad. Como ya he dicho otras veces sobre este tamaño de guitarras, no es aconsejable para guitarristas pequeñitos, entre los que me incluyo, simplemente por una cuestión de comodidad.
Si buscamos datos concretos sobre este modelo en la red, terminaremos más confundidos que informados. Hay muchos datos contradictorios en la información que dan los vendedores, principalmente sobre la tapa y el diapasón.
En algunas tiendas que aún la tienen a la venta, dicen que la tapa es de pícea maciza, pero no es cierto. La tapa es de pícea, pero laminada de cinco piezas, como se puede apreciar en esta foto:
Al mirar el interior de la guitarra por el hueco de la pastilla, me quedé con un detalle que no me gustó. El taco de refuerzo que lleva debajo del mástil, en el interior de la caja, es de tres piezas encoladas. Esta es una buena forma de aprovechar los trozos pequeños de madera que se van a tirar, pero me parece algo cutre, podrían usarlos para la calefacción, por ejemplo.
Los aros y el fondo son de arce, laminado también, con un rizo muy llamativo en la lámina que queda a la vista, que la verdad, le da un aspecto impresionante. El binding que bordea toda la caja y las efes es de color crema y queda muy bien con la madera al natural, muy cálido.
El puente flotante es de palosanto y está compensado para la tercera entorchada. La base del puente tiene más o menos la curva de la tapa, pero no termina de ajustar bien, no se le ha hecho el lijado correspondiente. Al estar las cuerdas puestas no se nota pero cuando está sin cuerdas se ve claramente que no se acomoda bien en la tapa, no hace un contacto pleno. Tiene un par de incrustaciones a los lados que pueden recordar al puente de la L5, pero con otro motivo.
Justo debajo del puente hay una pegatina que indica donde tiene que ir. Es bastante inútil y es la primera vez que lo veo.
El cordal es metálico, lo veo desproporcionadamente pequeño para tanta guitarra. No obstante, cumple su función, se enganchan bien las cuerdas y hace contacto con el cable de masa. ¿Qué más se le puede pedir a un cordal? Pues eso, que sea más grande.
Aproveché que tenía desmontada la guitarra para limpiar el cordal. Tenía una pátina mate sobre el dorado y mataba todo el brillo. Usé lana de aluminio de la más fina y el resultado fue espectacular. Es lo mejor para limpiar cromados o dorados sucios, pero eso sí, tiene que ser de la más fina, con otra más gorda el resultado puede ser desastroso.
En esta foto del cordal se puede ver la «C» a medio limpiar.
La guitarra tiene golpeador aunque no sale en las fotos, su dueño se lo quitó porque no le gusta. No me extraña, a pesar de ser de madera, estar hecho a mano y tal y tal, es horroroso.
El lacado está hecho con poliuretano pero es una capa bastante fina, que deja ver el relieve de la veta en la tapa. El acabado es impecable, por mucho que la he mirado no he encontrado ni un fallo.
El mástil es de arce, con forma de «C» fina, demasiado fina a mi gusto. Es de dos piezas, una pieza que va desde el «tacón» hasta debajo del traste 2º y ahí está encolada otra pieza , la de la pala. A este curioso sistema los llaman «scarf joint» y sirve para darle el ángulo necesario a la pala. Como no lo sé explicar mejor os pongo una foto:
A mí no me termina de gustar, pero por una cuestión estética. La seguridad de este sistema es absoluta y teóricamente hace las palas más resistentes a las roturas por caída y por supuesto, por donde se ha encolado, si está bien hecho, no se va a romper en la vida.
El diapasón es de palosanto, no ébano, como se puede leer en alguna ficha técnica de esta guitarra. El palosanto de esta en concreto es tan negro que podría pasar por ébano, pero el poro lo delata. Los trastes son tamaño medium jumbo y podrían estar mejor acabados en los cantos, aunque no llegan a molestar. Es de tiro corto, de 24 3/4″.
Después de ajustar la altura de las cuerdas al límite para evitar trasteos, se ha quedado una acción decente, en el traste 12º la altura es de 1’55 mm. en la 1ª y 1’85 mm. en la 6ª. Esta separación, usando unas cuerdas de calibre grueso 0’013-0’056, como las que calza ahora esta guitarra, puede resultar un poco dura para el que no esté acostumbrado, aunque yo estoy acostumbrado y las he pasado canutas para grabar el vídeo que pongo al final del post. Si os fijáis veréis que dura menos de lo que suelen durar los vídeos que cuelgo aquí, y es que me rompía la mano! Creo que el mástil tan fino es el culpable.
La pala es original de Cort. Lleva binding y la firma de Larry Coryell en el centro. Como dije al principio, la guitarra con la que posa Larry Coryell en las fotos de promoción, tiene la pala diferente. ¿Tendrá más partes diferentes? Nunca lo sabremos.
Las clavijas son genéricas y tienen las típica palometas tipo tulipán, funcionan con suavidad. La cejuela es de plástico negro baratero y las cuerdas no se deslizan bien.
ELECTRÓNICA
En esta ocasión Cort tiró la casa por la ventana y colocó un par de buenas humbuckers, unas Seymour Duncan, SH2 (Jazz) en el mástil y SH4 (JB) en el puente, con una salida de 7’7 K y 16’4 K respectivamente. En contra de lo que pueda parecer, su volumen no está tan desproporcionado como en el papel.
Esta es una combinación típica que funciona muy bien en guitarras sólidas, pero en una archtop de este tamaño no le encuentro el sentido.
Las dos pastillas llevan imanes de alnico V. Tienen bastantes agudos y además me resultan un poco rudas. Se hace imprescindible el uso del pote de tono para obtener un sonido cálido y jugando también con la ecualización del amplificador se pueden alcanzar resultados convincentes.
Me ha llamado la atención que al bajar el tono de la pastilla del puente, reducía drásticamente el volumen. No es normal.
Los dos volúmenes y tonos son Alpha de 500 K y no llevan condensador. El cableado es bastante pulcro y va todo pegado a la tapa, para que no se vea.
Lleva la masa conectada al cordal y no hace el más mínimo ruido.
CONCLUSIONES
Me he encontrado muy incomodo al tocar esta guitarra, no solo por el tamaño de la caja, también por el mástil delgado y el sonido duro. El tamaño de las guitarras es como el de los zapatos, tienes que probarla y te tiene que venir bien, no basta con que te guste como suena y te parezca bonita.
El sonido se puede arreglar tirando de tono o a las malas poniéndole otras pastillas más apropiadas, pero las medidas no tienen solución, tiene que gustarte tal como es.
Tiene un acabado espectacular y salvo pequeños detalles que se podrían mejorar, como el hueso, no hay por donde pillarle un fallo, y la he revisado con lupa.
Se la recomendaría al guitarrista grande (de tamaño) que esté empezando con las archtop y le gusten los mástiles finos y las cajas grandes.
DATOS TÉCNICOS
- Caja: 17″ (43’18 cm.). Tapa de pícea laminada, aros y fondo de arce laminado.
- Ancho: 3’5″ (89 mm.)
- Mástil: Arce
- Diapasón: Palosanto con incrustaciones en paralelogramos.
- Escala: 24 3/4″ (628’5 cm.)
- Radio: 12″
- Clavijas: Genéricas.
- Trastes: 20 semi-jumbo
- Pastillas: Seymour Duncan SH2 y SH4.
- Controles: 2 Volúmenes, 2 tonos, switch de 3 posiciones para cambio de pastilla.
- Puente: Flotante de palosanto.
- Cordal: Metálico, de diseño propio, con la «C» de Cort.
- Peso: 3’25 Kg.
Unas fotos. Aprovechando que hacía un día esplendido salí al parque a fotografiar la guitarra sobre fondo verde. Esto hace que a veces, en algunas instantáneas, se vean reflejos verdes que pueden engañar. La guitarra no es verdosa.
VÍDEO
Grabado con micro SENNHEISER e906. directo a la tarjeta de sonido Edirol FA-66.
Sonido sin procesar.
Audio en MP3, a 192 kbps. Es aconsejable escucharlo con auriculares, si no tienes unos buenos altavoces en tu PC.
El amplificador usado para esta prueba es un Roland Jazz Chorus 55.
Gracias a…
Miguel Angel «Monda» por volverme a confiar su guitarra, eso si, te la devuelvo brillante 😉
Y esto es todo por hoy. Ser muy buenas personas y hacer buena música, que falta le hace a este mundo.
Salud y bolos!