Para inaugurar este blog voy a presentaros una de mis guitarras, por la que siento especial debilidad. Lleva conmigo más de 20 años y más de una vez, después de una actuación, se me ha acercado alguien para ver qué guitarra era.
Esta es la pieza en cuestión:
También conocida como Mini Manhattan, sin duda por tener una «hermana» mayor, la X-175 Manhattan, de 17″ y 8 cm. de ancho de caja, ya que esta es de 16 5/8″ y 6’2 cm de caja. Fue manufacturada en Westerly, Rhode Island en 1988, cuarto año de fabricación de la X-170. Este año Guild solo fabricó 87 guitarras de este modelo, lo que da una idea del control de calidad de esta marca y, paradójicamente, de las pocas archtop que vendían.
El sonido amplificado de esta guitarra es dulce y redondo, con cuerdas de entorchado plano calibre 0’013-0’053 y la acción bajísima es una delicia tocarla, no cuesta nada, a pesar del grosor de las cuerdas. Los graves que proyecta son gruesos y muy comprimidos. Los medios y agudos son cálidos y definidos. Es ante todo una guitarra con mucha definición y mucho cuerpo.
El sonido acústico es poco y muy pobre ya que dentro de la caja lleva un trozo de madera apoyado justo debajo del puente en la tapa y contra el fondo, como el “alma” de los contrabajos. Esta pieza anula lo poco que pudiera vibrar la tapa laminada y mata totalmente el sonido acústico pero, por contrapartida, no se acopla en lo más mínimo a altos volúmenes.
Es una guitarra polifacética que se puede usar igual para jazz clásico, moderno, R&R y hasta algo de rock con saturaciones fuertes, las aguanta muy bien sin acoplarse, aunque no es lo suyo. El tono de la pastilla de agudos nos da mucho juego y tiene un 100% de recorrido útil, como podréis ver en los vídeos que he grabado.
El tamaño de la caja es ideal ya que, si bien es de casi 17″ el grosor reducido la hace muy cómoda y manejable. Es de arce laminado, tapa, aros y fondo. El laminado es de cuatro piezas de arce de un milímetro de grosor.
Nada más comprarla me pareció que la capa de poliuretano que llevaba era demasiado brillante y decidí dejarla mate y rebajar el grosor puliéndola con un estropajo usado (que disparate!). Quedó mucho más discreta y ahora le favorece especialmente el haberse ido amarilleando con los años.
El mástil es de arce de dos piezas, con una fina tira central de caoba. El diapasón es de palosanto con binding e inlays rectangulares imitando nácar. Es el mástil más cómodo que he probado y permite bajar la altura de las cuerdas hasta dejarlas casi pegadas a los trastes y sin cerdear, cosa que es físicamente imposible, pero cierta. Imagino que algo tendrá que ver que el último cambio de trastes lo hiciera Fernando Alonso Jaén, de guitarras Jaén, gran guitarrero!
Las humbuckers son unas Guild HB1 de salida baja, las mismas que empezó a montar en todas sus guitarras a partir de los años 60, aunque más tarde (80’s) también usaron DiMarzio fabricadas especialmente para Guild, pero finalmente volvieron a usar HB1 . Llevan tres tornillos para ajustar la altura, cosa que resulta muy útil a la hora de ponerlas paralelas a las cuerdas, es muy práctico. No sé por qué siguen haciendo las humbuckers con solo dos tornillos de ajuste pudiéndolas hacer con tres.
La electrónica es simple y tradicional: dos volúmenes y dos tonos, todos de 500K.
El recorrido del tono es más útil en la pastilla de agudos que en la de graves, es decir, el tono de la humbucker del mástil es útil hasta el 30% del recorrido aproximadamente, a partir de ahí el sonido se vuelve demasiado oscuro, sin definición y por tanto bastante inútil. En cambio, en la pastilla del puente podemos obtener un sonido válido bajando el tono al máximo, un sonido muy nasal pero útil.Se pueden conseguir sonidos muy «Methenyanos» combinando las dos pastillas y jugando con el tono.
Todas las piezas metálicas son doradas, aunque de dorado les queda poco, solo el cordal sigue brillando, es una de las pegas de vivir cerca del mar, pero compensa en otros aspectos.
Llevaba un golpeador estilo Art Decó -como el cordal- que aún conservo, pero el día que pulí la guitarra me gustó más sin golpeador y así se quedó, hasta hoy.
Datos técnicos:
- Caja de 42 cm (16 5/8”). Ancho: 62 mm.
- Cuerpo, aros y fondo – Arce laminado.
- Mástil – Arce de dos piezas con tira central de caoba. Con Binding. 20 trastes. 42 mm de ancho en el hueso.
- Diapasón – Palosanto con incrustaciones en bloque de nácar.
- Radio – 12″
- Clavijas – Grover Rotomatic.
- Electrónica – Dos humbuckers Guild HB1, con cubierto dorada. Dos volúmenes y dos tonos. Conmutador de 3 posiciones.
- Puente – Flotante compensado de palosanto.
- Cordal – Metálico, tipo art decó y dorado.
- Clavijas – Grover doradas.
- Tiro – Corto de 24’7”
- Peso – 3’4 Kg.
Unas fotos. Las podéis ver más grandes pinchando sobre ellas:
Las HB1 con sus tres prácticos tornillos:
Vídeos
El audio de los vídeos ha sido grabado con un micro Rode NT2 directo a la tarjeta de sonido Edirol FA-66. El sonido está tal como se grabó, no está editado. He usado un pedal de reverb Harwire RV7.
Primero hay un poco de guitarra sola para que podáis apreciar bien el sonido, después toco sobre una base con batería y contrabajo el tema «In Walked Bad» de Thelonius Monk.
Las muestras con el amplificador Polytone tienen más graves de lo normal debido a las condiciones acústicas de la pequeña habitación y al altavoz de 15″ que porta dicho ampli. He preferido dejarlo así por no editar el sonido, pero hay que tenerlo en cuenta.
Aquí la podéis ver en acción con un ampli Polytone MiniBrute III:
Y aquí con un ampli Koch Studiotone:
Sobre Guild Guitars Company
Guild Guitars fue fundada en 1952 por Alfred Dronge, guitarrista profesional y propietario de una pequeña tienda de música y George Mann, ejecutivo que venía de Epiphone Guitars Company, recién «fusionada» con Gibson.
Su idea era competir con Gibson en el terreno de las archtops y con Martin en el de las acústicas y vaya si lo consiguieron!
La primera fábrica de guitarras la montaron en Manhattan (Nueva York) y funcionaron con éxito y vendieron muchas guitarras y comieron perdices, así que al poco tiempo decidieron ampliar y se trasladaron a Hoboken (Nueva Jersey). Allí montaron una factoría mucho más grande, aunque se les volvió a quedar pequeña, eran buenos tiempos para la venta de guitarras!
En 1966 se volvieron a mudar, esta vez a Westerly (Rhode island) donde se quedarían definitivamente.
Allí mantuvieron unos estándares de calidad que ha hecho de Guild una de las marcas más respetadas dentro del mundillo de las guitarras de jazz. No hay años buenos y años malos, como en otras marcas, puede haber modelos mejores o peores pero la calidad de construcción de estas guitarras ha sido siempre excelente.
Varios guitarristas colaboraron en el diseño de algunos modelos, como Johnny Smith para desarrollar la «Guild Artist Award», la más selecta de todas las archtops, muy buscada hoy en día por músicos y coleccionistas. Es la única Guild que está hecha con maderas macizas y talladas, todas las demás son de laminado.
George Barnes también colaboró en el diseño de una rareza. Las guitarras de la época tenían muchos problemas de acoples y ni corto ni perezoso este señor diseñó una guitarras sin las «efes», los agujeros característicos en forma de efe. En su lugar tenía unos agujeros rectangulares debajo de las pastillas y estas iban pegadas al golpeador. El modelo se llamó «Guild George Barnes Acusti Lectric» y hoy es totalmente imposible encontrarlo. Se fabricaron solamente durante 5 años, de 1963 a 1968, y muy pocas.
George Benson, uno de los mejores guitarristas de jazz de la historia, fue usuario de diferentes Guild a finales de los años 60, una de ellas fue la X-175 Manhattan.
El guitarrista de rockabilly Duane Eddy también diseñó su propio modelo, la «Guild Duane Eddy», no podía llamarse de otra manera. Esta fue una de las primeras en llevar un vibrato «Guildby», que viene a ser un «Bigsby» pero fabricado por Guild y prácticamente igual.
En 1995 Guild Guitars fue comprada por Fender y «salvó» la marca de tener que desaparecer. A finales de los 90 bajó la calidad, llegando a preparar los “kits” en Westerly para montarlos después en Corona (California), aunque al menos seguían siendo Made in USA. Las humbuckers también cambiaron, pero siguieron conservando la misma estética de las HB1, aunque ya no lo eran, por supuesto esto afectó directamente al sonido de las nuevas Guild.
En 2004 dejaron de fabricar Guild eléctricas en Estados Unidos y actualmente solo hacen alguna edición limitada a precios de Custom Shop, como es lógico, que Fender tiene que pagar mucha publicidad. El resto de archtop que fabrican son coreanas, incluida la X-175 Manhattan, copia que es una caricatura de la original.
Gibson fabricó una guitarra prácticamente igual que la X-170 de 1955 a 1963, aunque la volvió a fabricar en 1977 hasta 1981, el modelo ES-350-T, «T» de «Thinline» ya que la ES-350 era bastante más ancha de caja.
Actualmente, si puedes encontrar alguna de estas Gibson en el mercado vintage cuesta unos cuantos miles de euros más que las Guild de la misma época.
Si tienes alguna Guild americana y quieres saber de qué año es, en esta página podrás datarla, solo tienes que descargar el pdf:
http://www.guildguitars.com/es-ES/support/dating_your_guild/
Y esto es todo amigos.
Espero que os haya gustado esta primera review. Procuraré hacer una nueva dentro de 15 días, de otra guitarra o un amplificador… ya veremos. Mientras tanto, ser muy felices!
Salud y bolos!